El año 2017 fue devastador en cuanto a incendios forestales, especialmente en Portugal donde murieron 64 personas en el mes de junio en un masivo incendio en el centro del país luso. Además, otras 45 personas murieron (y 4 más en España) en unos inusuales incendios en el mes de octubre avivados por la cercanía de una potente borrasca en el Atlántico.
Ahora, la cooperación entre los dos países ibéricos ha dado un paso más para tratar de combatir los incendios forestales a ambos lados de la frontera.
Los bomberos de ambos países podrán adentrarse en suelo del otro país sin necesidad de autorización para proceder a apagar un fuego hasta los 25 kilómetros desde la frontera de ambos países. El acuerdo se ha firmado en Oeiras en las cercanías de Lisboa. Todo un ejemplo de cooperación internacional para combatir con la mayor rapidez posible el fuego.